Día Mundial del Agua (22 de marzo 2011) – Llevar agua potable a las comunidades: el papel de la OIT
A pesar de la declaración de la Asamblea General de Naciones Unidas que establece que el agua potable es un derecho humano fundamental, miles de personas mueren cada día como consecuencia de enfermedades relacionadas con el agua, y se prevé que muchos países no alcanzarán los Objetivos de Desarrollo del Milenio relacionados con el agua. La OIT trabaja con gobiernos y organizaciones de empleadores y trabajadores para identificar las inversiones prioritarias en infraestructuras destinadas a crear oportunidades de empleo y llevar agua potable a las comunidades. De cara al Día Mundial del Agua, el 22 de marzo, OIT EnLínea habló con Carlos R. Carrión-Crespo, Especialista en Servicios y Suministros Públicos del Departamento de Actividades Sectoriales de la OIT.
¿Por qué el tema del agua ha cobrado tanta importancia en la agenda mundial?
Carlos R. Carrión-Crespo: El acceso al agua es un medio importante para reducir la pobreza, de varias maneras. El acceso seguro al agua evitaría más de dos millones de muertes al año, aumentaría la posibilidad de muchas personas de trabajar y reduciría el trabajo infantil y el absentismo escolar. En los últimos tiempos, se ha prestado mayor atención a la necesidad de adaptarse a los cambios climáticos porque estos afectarán la disponibilidad de suministrar agua a todas las personas. Este es el motivo por el cual la Asamblea General de Naciones Unidas declaró en 2010 que el acceso al agua potable es un derecho humano.
¿Cómo puede la OIT ayudar a llevar agua potable a las comunidades?
Carlos R. Carrión-Crespo: Enfrentar la creciente necesidad de agua y servicios de saneamiento, en particular en las ciudades, es uno de los temas más apremiantes de este siglo. Los empleadores y trabajadores están involucrados de manera activa en el suministro de agua. La OIT apoya con firmeza la participación de trabajadores y empleadores en las reformas del servicio de agua y la creación de empleo en proyectos de infraestructura relacionados con el agua. Las reformas sobre suministro de agua que tienen en cuenta la dimensión social del problema tienen mayores probabilidades de recibir un apoyo más amplio por parte de trabajadores, empleadores y ciudadanos. Además, estas actividades pueden colaborar con la lucha contra el trabajo infantil a través de la mejora del acceso al agua.
¿Cuáles son los vínculos específicos entre el agua y el mundo del trabajo?
Carlos R. Carrión-Crespo: Existen muchos vínculos. Para citar sólo algunos: la falta de acceso al agua obstaculiza la actividad productiva y la educación; el cambio climático tiene un gran impacto sobre las fuentes de agua y los empleos e ingresos relacionados; y las enfermedades producidas como consecuencia del agua insalubre reducen la productividad y ponen presión sobre el sistema sanitario de un país. Por otra parte, si se garantiza el suministro eficaz de agua rural, esto mejora el acceso a las oportunidades de generar ingresos. Además, se pueden crear empleos verdes al mejorar la infraestructura relacionada con el agua, incluyendo las actividades de forestación.
¿De qué manera el acceso al agua tiene un impacto en la educación y el trabajo infantil?
Carlos R. Carrión-Crespo: Cuando el acceso al agua no está garantizado, la mayor parte de la responsabilidad del suministro recae sobre las mujeres y los niños. Mejorar el acceso a los servicios básicos puede ser una herramienta poderosa para reducir el trabajo infantil e incrementar la asistencia a la escuela. En este contexto, dos tipos de servicios básicos parecen ser especialmente importantes: el agua y la electricidad. La falta de acceso al agua puede aumentar el valor del tiempo de los niños en actividades no escolares, ya que los niños son necesarios para encargarse de recolectar agua o ayudar a cubrir el costo de comprar agua. Estudios por país en El Salvador, Ghana, Guatemala, Marruecos y Yemen muestran que el porcentaje de niños que trabajan a tiempo completo es mucho más alto, y la tasa de asistencia escolar a tiempo completo es mucho más baja, entre niños cuyos hogares no tienen acceso al agua o a la electricidad.
¿Cuál es la contribución de la OIT al Día Mundial del Agua?
Carlos R. Carrión-Crespo: En ocasión del Día Mundial del Agua 2011, ONU-Agua realizará un evento a nivel mundial que girará entorno a la gestión del agua en las ciudades. La OIT destacará la contribución que el mundo del trabajo puede aportar a soluciones a largo plazo en ese contexto. En particular, llevaremos a cabo una iniciativa relacionada con el día mundial del agua el 18 de marzo 2011 en Tagaytay, Filipinas. Durante esta iniciativa, la OIT presentará un plan de acción para facilitar que trabajadores y empleadores contribuyan a las reformas del sector del agua en Filipinas. El plan analizará la manera en que las empresas de suministro de agua pueden asociarse con las organizaciones de empleadores para encontrar vías concretas destinadas a establecer alianzas que conduzcan a servicios públicos de calidad.
¿Qué puede decirnos sobre las actividades de la OIT relacionadas con el agua en otros países?
Carlos R. Carrión-Crespo: La OIT trabaja con los gobiernos para identificar las inversiones prioritarias en infraestructura con el objetivo de crear oportunidades de empleo y llevar agua a las comunidades. La OIT también ayuda a gobiernos, trabajadores y empleadores a promover reformas sostenibles y participativas del suministro de agua en países como Nigeria, Malawi y Perú, para aumentar el acceso al agua potable.
Además, el Programa Empleos Verdes de la OIT participa en los esfuerzos internacionales de desarrollo sostenible –en el marco de Río+20 y de las discusiones de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC)– para garantizar que se tomen en cuenta la dimensión social y laboral. En especial, la OIT promueve una “transición justa” de trabajadores y hogares vulnerables a un mundo del trabajo transformado por el cambio climático y otros desafíos medioambientales.
Carlos R. Carrión-Crespo: El acceso al agua es un medio importante para reducir la pobreza, de varias maneras. El acceso seguro al agua evitaría más de dos millones de muertes al año, aumentaría la posibilidad de muchas personas de trabajar y reduciría el trabajo infantil y el absentismo escolar. En los últimos tiempos, se ha prestado mayor atención a la necesidad de adaptarse a los cambios climáticos porque estos afectarán la disponibilidad de suministrar agua a todas las personas. Este es el motivo por el cual la Asamblea General de Naciones Unidas declaró en 2010 que el acceso al agua potable es un derecho humano.
¿Cómo puede la OIT ayudar a llevar agua potable a las comunidades?
Carlos R. Carrión-Crespo: Enfrentar la creciente necesidad de agua y servicios de saneamiento, en particular en las ciudades, es uno de los temas más apremiantes de este siglo. Los empleadores y trabajadores están involucrados de manera activa en el suministro de agua. La OIT apoya con firmeza la participación de trabajadores y empleadores en las reformas del servicio de agua y la creación de empleo en proyectos de infraestructura relacionados con el agua. Las reformas sobre suministro de agua que tienen en cuenta la dimensión social del problema tienen mayores probabilidades de recibir un apoyo más amplio por parte de trabajadores, empleadores y ciudadanos. Además, estas actividades pueden colaborar con la lucha contra el trabajo infantil a través de la mejora del acceso al agua.
¿Cuáles son los vínculos específicos entre el agua y el mundo del trabajo?
Carlos R. Carrión-Crespo: Existen muchos vínculos. Para citar sólo algunos: la falta de acceso al agua obstaculiza la actividad productiva y la educación; el cambio climático tiene un gran impacto sobre las fuentes de agua y los empleos e ingresos relacionados; y las enfermedades producidas como consecuencia del agua insalubre reducen la productividad y ponen presión sobre el sistema sanitario de un país. Por otra parte, si se garantiza el suministro eficaz de agua rural, esto mejora el acceso a las oportunidades de generar ingresos. Además, se pueden crear empleos verdes al mejorar la infraestructura relacionada con el agua, incluyendo las actividades de forestación.
¿De qué manera el acceso al agua tiene un impacto en la educación y el trabajo infantil?
Carlos R. Carrión-Crespo: Cuando el acceso al agua no está garantizado, la mayor parte de la responsabilidad del suministro recae sobre las mujeres y los niños. Mejorar el acceso a los servicios básicos puede ser una herramienta poderosa para reducir el trabajo infantil e incrementar la asistencia a la escuela. En este contexto, dos tipos de servicios básicos parecen ser especialmente importantes: el agua y la electricidad. La falta de acceso al agua puede aumentar el valor del tiempo de los niños en actividades no escolares, ya que los niños son necesarios para encargarse de recolectar agua o ayudar a cubrir el costo de comprar agua. Estudios por país en El Salvador, Ghana, Guatemala, Marruecos y Yemen muestran que el porcentaje de niños que trabajan a tiempo completo es mucho más alto, y la tasa de asistencia escolar a tiempo completo es mucho más baja, entre niños cuyos hogares no tienen acceso al agua o a la electricidad.
¿Cuál es la contribución de la OIT al Día Mundial del Agua?
Carlos R. Carrión-Crespo: En ocasión del Día Mundial del Agua 2011, ONU-Agua realizará un evento a nivel mundial que girará entorno a la gestión del agua en las ciudades. La OIT destacará la contribución que el mundo del trabajo puede aportar a soluciones a largo plazo en ese contexto. En particular, llevaremos a cabo una iniciativa relacionada con el día mundial del agua el 18 de marzo 2011 en Tagaytay, Filipinas. Durante esta iniciativa, la OIT presentará un plan de acción para facilitar que trabajadores y empleadores contribuyan a las reformas del sector del agua en Filipinas. El plan analizará la manera en que las empresas de suministro de agua pueden asociarse con las organizaciones de empleadores para encontrar vías concretas destinadas a establecer alianzas que conduzcan a servicios públicos de calidad.
¿Qué puede decirnos sobre las actividades de la OIT relacionadas con el agua en otros países?
Carlos R. Carrión-Crespo: La OIT trabaja con los gobiernos para identificar las inversiones prioritarias en infraestructura con el objetivo de crear oportunidades de empleo y llevar agua a las comunidades. La OIT también ayuda a gobiernos, trabajadores y empleadores a promover reformas sostenibles y participativas del suministro de agua en países como Nigeria, Malawi y Perú, para aumentar el acceso al agua potable.
Además, el Programa Empleos Verdes de la OIT participa en los esfuerzos internacionales de desarrollo sostenible –en el marco de Río+20 y de las discusiones de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC)– para garantizar que se tomen en cuenta la dimensión social y laboral. En especial, la OIT promueve una “transición justa” de trabajadores y hogares vulnerables a un mundo del trabajo transformado por el cambio climático y otros desafíos medioambientales.
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